La pálida princesa Paula paseaba pausadamente por los parques y praderas de su palacio de París.
Portaba preciosos peinados y perlas; a pesar de sus privilegios poseía una pena... Puesto que el príncipe Pedro pensaba paulatinamente en Petronila , prima de Paula. Petronila parecía pesada con el principe Pedro pero a Paula no le preocupaba... Hasta que el príncipe proporcionó un pendiente primoroso a Petronila. El pendiente poseía piedras preciosas. Paula poseía una gran pesadumbre por lo que lo parloteó con el príncipe Pedro. Él parecía pánfilo y la princesa no paraba de plañir. El príncipe, al percatarse de la pesadumbre de la princesa, le pidió perdón y le precisó que proporcionó el pendiente a Petronila porque esta parecía muy persistente con el príncipe en poseer el primoroso pendiente y el príncipe perfiló que no pensaba en ella.
El príncipe Pedro, la princesa Paula y su prima Petronila, una historia triangular cosida con términos que comparten la misma inicial. Bien, Clara. Tu trabajo cumple perfectamente con las condiciones que se exigían para esta primera creación.
ResponderEliminarFijémonos ahora en lo que podemos mejorar. Tú has escrito: "poseía una pena... Puesto que el príncipe Pedro pensaba paulatinamente en Petronila , prima de Paula". ¿Por qué puntos suspensivos tras "poesía una pena"? No son necesarios. Tú unes esas dos proposiciones (oraciones) con la locución conjuntiva "puesto que".
En las redacciones evita los períodos oracionales largos. Nos perdemos en ellos. Hasta que dominemos la expresión escrita, mejor emplear oraciones simples, directas, que transmiten más eficazmente aquello que queremos comunicar.
Bien, Clara